Nació el 19 de abril de 1933 en Bryn Mawr, Pennsylvannia (EEUU). Más que una actriz, un mito sexual, desarrolló una mediocre carrera en la que se limitó a exhibir sus generosas medidas sin reparo alguno. Era hija de un abogado que la dejó huérfana desde muy niña. Contrajo matrimonio a los 16 años con Paul Mansfield, apropiándose de su apellido de casada para su nombre artístico. Comienza con algo de televisión y luego como explosiva modelo. La Fox la contrata como una especie de copia barata de Marilyn Monroe, pero resulta más vulgar y sin la dulzura de aquella. Sus únicos films destacables, Una mujer de cuidado y The Girl Can´t Help It, fueron dirigidos por Frank Tashlin. De escandalosa vida privada, acostumbraba a formar el numerito junto a su marido, el Mister Universo Mike Hargitay, con quien vivía en una espeluznante mansión en la que todo era de color rosa. Su decadencia llegaría pronto, interviniendo en cintas cada vez peores y siendo la primera estrella importante en aparecer desnuda en una pantalla. Fallece a la edad de 34 años en un aparatoso accidente de coche ocurrido el 29 de junio de 1967 en Nueva Orleans, Louisiana (EEUU).