Nació el 17 de julio de 1894 en Yonkers, Nueva York (EEUU). Uno de los grandes del cine, pese a ser bajito, feo y arrogante. De personalidad arrolladora y legendaria capacidad para la dicción, fue uno de los más clásicos gángsters del cine. Comenzó en el vaudeville, cantando y bailando junto a su esposa Francis, de la que jamás se separaría. Tras conseguir notoriedad en algunos musicales de Broadway, es contratado por la Warner Bross para encarnar al salvaje gángster de El enemigo público, que le convertirá inmediatamente en estrella. Después vendrá una larga serie de personajes de mala vida que el actor bordará en films como Ángeles con caras sucias –por el que conseguirá una nominación al Oscar– o Los violentos años veinte. Sin embargo, siempre querrá explotar su faceta de bailarín y así lo hará en Yanqui Dandy, por la que conseguirá su único Oscar. Durante los años cincuenta todavía se le podrá ver en plena forma en westerns, comedias y musicales, destacando su impresionante interpretación en Love Me or Leave Me, por la que sería nuevamente nominado. Tras su soberbia actuación en Uno, dos, tres, de Wilder, anuncia su retirada, sólo rota en 1981 cuando Milos Forman le convence para que aparezca en Ragtime. Destrozado por la diabetes, fallece el 30 de marzo de 1986 en Sandfordville, Nueva York (EEUU).